En octubre de 2024, la población de Valencia sufrió una catástrofe sin precedentes, que dejó daños profundos, tanto materiales como a nivel más sutil y silencioso.
Sin dudarlo, desde Coloria quisimos ser parte de la reconstrucción emocional de niños y niñas afectados por la DANA, y diseñamos una propuesta que permitiera a los menores trabajar internamente con la situación vivida. Para ello creamos un nuevo cuento sin final: El viaje de tortuga, escrito por Susan Perrow, una story teller australiana referente en cuentos sanadores.
¿Nuestro objetivo? Llevar este cuento a colegios en poblaciones afectadas, a través de un nuevo taller de creatividad y refuerzo emocional, diseñado de la mano de un equipo de psicólogos infantiles, especializados en gestión del trauma.
Iberdrola ha sido la primera empresa en colaborar para hacer realidad este ilusionante proyecto. A través de su programa de Voluntariado Corporativo, el pasado mes de marzo realizamos los primeros talleres en el CEIP Rosa Serrano, junto a 11 voluntarios de la empresa quienes, tras recibir una formación inicial, tuvieron un rol fundamental, acompañando a los menores en este viaje de creatividad y conexión emocional.
Hoy, a 3 meses de esos primeros pasos, ya son más de 950 las personas que han disfrutado de uno de los 35 talleres de “El viaje de la tortuga” que hemos realizado hasta el momento y que nos han llevado a visitar 8 centros educativos y bibliotecas en zonas afectadas de Valencia.
A través de la imaginación, el autoconocimiento y la creatividad, hemos cultivado la esperanza, el agradecimiento y la resiliencia: semillas esenciales para afrontar de forma saludable situaciones traumáticas. Y no sólo en los peques que han participado, sino también en cada uno de los adultos que nos han acompañado en este camino.
Hoy podemos decir con orgullo que el 100% de los voluntarios quiere repetir la experiencia, que califican como apasionante y transformadora.
El apoyo corporativo que hemos recibido demuestra un compromiso y responsabilidad social de alto impacto. Gracias a la sensibilidad y colaboración de Iberdrola, más de 400 niños hoy sienten mayor bienestar. Además de una experiencia motivante y sanadora, cada menor ha recibido su propio libro personalizado, con su nombre impreso en la portada y su final escrito y dibujado.
Nos entusiasma el camino recorrido. ¡Y esto no ha hecho más que empezar! A partir de septiembre, continuaremos llevando nuestros talleres a más centros educativos, más menores y más familias.
Aún son miles las niñas y niños que esperan reescribir su historia. ¿Nos ayudas a continuar el viaje sanador de tortuga?